Hace muchos a�os que sucedi�, yo ten�a tan solo 14 a�os y en
un alegre mes de diciembre como siempre suced�a, mis primos que Vivian en el
extranjero llegaron de vacaciones a mi ciudad. El mayor de ellos que ten�a 19
a�os y a quien yo admiraba mas por los costosos perfumes que usaba y las
elegantes ropas que lucia, empez� a seducirme y me obsequio un delicioso y
cremoso perfume el cual el mismo esparci� en sus manos y lo froto cuidadosamente
en mi cara y mientras lo hacia me dijo: "d�jame ponerte perfume en todo tu
cuerpo" abri� mi camisa y meti� su mano en mi pecho siempre con sus manos llenas
del aromoso y costoso perfume y con promesas de darme uno de sus m�s preciados
vestidos.
Me pidi� que me desnudara para medirme una de las prendas
prometidas. Para ese momento ya �l ten�a mi camisa totalmente abierta y la
verdad es que sus manos se concentraron solo en mis tetillas frot�ndolas con sus
humedecidos dedos lenta pero fuertemente. Estas no nunca hab�an sido tocadas por
nadie y la verdad fue que me gusto y es que sent� algo tan extra�o en mi cuerpo
que en ese momento no me importaba lo que podr�a pasar.
Yo me quit� mis zapatos y tras de ellos baje mis pantalones,
situaci�n que acelero el ritmo y excitaci�n de mi primo quien de repente me
sorprendi� d�ndome un beso, un largo y profundo beso como nunca me habian dado y
que yo acepte como el pre�mbulo de algo maravilloso y desconocido para mi. Me
desnudo de la cintura para abajo y el hizo lo mismo y de nuevo unto sus manos
con el cremoso perfume y lo froto en mi trasero, me abrazo fuertemente con su
cuerpo y en ese momento sent� su miembro erecto y vibrante contra el m�o que
igual que el de mi primo, se levantaba erecto con los deseos mas excitantes de
iniciar su carrera en el sexo.
Mi miembro erecto lo enloquecio, en un segundo, sent� con mas
fuerza el otro miembro contra el mio. En aquellos tiempos me gustaban las
mujeres pero nunca pens� que ese acontecimiento fuera a cambiar mi vida. Sent�
atracci�n sexual por �l, sent� el deseo de besarlo de tocarlo y de hecho le
ofrec� de nuevo mis labios los cuales deje que besara en forma desenfrenada.
Creo que me excite mucho, �l termino por dejarme totalmente desnudo, ya no
importaba la ropa de obsequio solo quer�a sus besos, quer�a que sus manos
navegaran por todo mi cuerpo y as� llego con ellas a mi pene el cual acaricio
con deseo y de un solo salto lo puso en su boca, fue un momento de locura mis
gemidos hac�an que su lengua ba�ara todo mi miembro, era un experto frente a un
joven iniciando el sexo, pero ese joven estaba �vido por aquello que le era
desconocido pero que le causaba tanto placer.
Mi primo no terminaba de besarme y tocarme todo el cuerpo,
sent�a rozar sus dedos y hacer algo de opresi�n en mi trasero, me sent� en una
orilla de la cama en ese instante yo ya estaba totalmente entregado al placer y
acercando su pene a mi boca trate de imitar el trabajo que �l hab�a hecho con el
m�o y con el grado de locura lo met� todo en mi boca y lo chupaba como si fuera
la m�s rica recompensa.
Luego el tomo mis caderas y con un giro suave me dejo caer
boca abajo en la cama puso una de sus m�s finas cremas en su pene y yo
ofreci�ndole mi cuerpo abr� las piernas y le rogu� que me penetrara. Pero ese
ruego no fue necesario por su experiencia en pocos segundos me hizo suyo.
Fue un momento inolvidable un momento de locura y en ning�n
momento pese a poseerme no descuidaba de acariciar y besarme, cuando sent� que
su movimiento se aceleraba yo le ped�a que me abrazara hasta que despu�s de un
gemido loco sent� su liquido correr por mi espalda, me volteo me beso
profundamente tomo mi pene y lo llevo de nuevo a sus boca y solo tardaron unos
segundos para yo reventar en locura y dejar todo mi liquido en su boca, lo trago
todo con mucha pasi�n y dulzura y finalmente ca�mos en un abrazo y as�
permanecimos por mas de una hora.